En un soleado sábado de junio de 2022, la pareja formada por María, una novia Impúribus, y Javier decidieron sellar su amor en una boda inolvidable.
Sin demasiadas formalidades ni protocolos, su compromiso surgió de manera espontánea, reflejando la autenticidad de su relación.
Cómo se conoció la pareja
Javier y María se encontraron por primera vez en octubre de 2017, durante sus estudios de máster que se extendieron hasta junio de 2018. A medida que compartían clases y trabajos académicos, surgía una conexión especial entre ellos. Lo que comenzó como una amistad pronto se transformó en algo más profundo, y para marzo de 2018, ya estaban saliendo oficialmente. Su historia de amor floreció en un ambiente de camaradería y complicidad, sentando las bases de una relación sólida y duradera.
El vestido de novia de María fue mucho más que un simple atuendo; fue una expresión de su personalidad y de los momentos importantes de su vida.
«Su traje de novia, es sin duda, uno de los diseños más simbólicos que he diseñado para una novia».– Sara.
“Quería hacerme un vestido a medida porque deseaba que fuera lo más fluido y natural posible, lo más acertado a mi personalidad. Sara entendió mi estilo desde la primera cita y además me acompañó en mi idea creativa: quería un vestido inspirado en el lugar favorito de mi madre, ¡la playa y el mar! El proceso fue precioso. La inspiración estaba en mi cabeza pero no había un modelo igual en el que basarse… la paciencia, atención y detalle de Sara lo hizo todo mucho más fácil. Daba forma en las telas lo que yo verbalizaba, y eso era mágico.” – nos cuenta la novia.
Inspirado en su amor por el mar y en homenaje a su madre, el vestido fue diseñado con un toque único: era de un suave tono azul turquesa, evocando la tranquilidad y la serenidad del océano que tanto amaban. Confeccionado a medida por nuestro atelier, el vestido capturaba la esencia de María de una manera auténtica y original. Llevaba un vestido de crepé, con mangas de bambula de seda en color. Un chaleco con volante en la cintura y una sobrefalda etérea en la mismo tejido. Todo ello desmontable, para ir consiguiendo diferentes looks a lo largo del día.
Los bordados personalizados
“Hacia el final del proceso, decidí que quería bordados con inspiración marina en mi vestido. Sara contactó con Luneville y fue el broche de oro. En tiempo récord conseguimos «salpicar» el vestido de divertidos bordados: estrellas de mar, caracolas, corales, etc…”.- dice María.
Los detalles bordados a mano, como estrellas de mar, caracolas y corales, diseñados por Vic de Luneville, añadían un toque distintivo y personalizado, convirtiendo el vestido en una verdadera obra de arte. Con cada puntada, el vestido contaba la historia de María y Javier, uniendo pasado, presente y futuro en un símbolo de amor eterno.
Por otro lado, los accesorios elegidos complementaron a la perfección el estilo de María. Optó por unos zapatos de Magrit que agregaron un toque único al conjunto.
Las joyas de la familia añadieron un valor sentimental a un día tan importante para la pareja.
El look beauty de María fue cuidadosamente elaborado por Jesús Ortega, quien creó un maquillaje natural y un peinado elegante que realzaban su belleza natural y complementaban el estilo de su vestido.
La celebración
La celebración tuvo lugar en el hermoso Santuario de Nuestra Señora de Flores, en Álora, Málaga, un lugar con un significado especial para María, donde descansa su madre y donde sus padres también se unieron en matrimonio.
Con una ceremonia impregnada de emotividad y simbolismo, los novios intercambiaron votos rodeados de la belleza del campo andaluz y el amor de sus seres queridos, junto con 8 testigos amigos de las distintas etapas de sus vidas.
Por su parte, Javier lució un traje de Hugo Boss que destacaba por su elegancia y sofisticación, complementando perfectamente el estilo de María y la temática marina de la boda.
Tanto el ramo de la novia como la decoración y los detalles de la boda fueron montados por Floristería Sierpes, quienes lograron crear un ambiente encantador y acogedor inspirado en el mar y la playa, con mesas nombradas según playas que María y Javier habían visitado y flores de hortensias azules como guiño a Galicia, en referencia al novio, y al color del océano.
El banquete se celebró en El Balneario de los Baños del Carmen en Málaga, frente al mar, siguiendo la misma temática marina que inspiró el vestido de María. Las mesas estaban cuidadosamente decoradas y el menú fue seleccionado con esmero para deleitar a los invitados con exquisitos platos que evocaban los sabores del mar.
Las fotos de la boda fueron capturadas por Víctor Muñoz, quien logró inmortalizar cada momento especial y cada detalle de este día tan importante en la vida de María y Javier.
Queremos agradecer especialmente a María y Javier su generosidad al compartir con nosotros, estos maravillosos recuerdos del día de su boda.
Traje de novia Impúribus
Bordados personalizados Luneville
Ramo de la novia y decoración floral Floristería Sierpes
Zapatos de la novia Magrit
Traje del novio Hugo Boss
Celebración El Balneario de los Baños del Carmen de Málaga
Fotógrafo Víctor Muñoz
impuribus@impuribus.com
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